El sofá es, sin duda, ‘el rey de la casa’, con permiso de la cama. Por eso, su elección es un proceso importante, que debe hacerse, incluso, al margen de su coste. Es preciso que encaje en nuestro salón y dé respuesta a nuestras necesidades. Pasamos tanto tiempo en él, que más que un asiento es un refugio, un lugar donde compartir tarde de domingos, celebrar maratones de series, leer un buen libro, descansar después de un ajetreado día, echar una siesta a deshora o dejar pasar los minutos y las horas, mientras el ritmo de la casa no se detiene.